"
Si no fuera por mi marido no volvía a España"
Dolores
Martínez es y ha sido una mujer luchadora. Vivió sin madre y
prácticamente sin padre toda su vida, junto a sus dos hermanos, en
una época que no fue benévola con nadie. Trabajando desde los
catorce y emigrante a Alemania poco después de casarse, asegura que
aquí todo estaba mal hasta que los pocos que se marcharon fueron
levantando el país. Y que ahora lo estamos estropeando todo.
P:
¿Dónde vivían Ud. y su familia cuando era pequeña?
R:
En la Lama, en un lugar que se llama A Cabada.
P:
¿Tenía amigos allí?
R:
En la Lama sí, pero en la zona en la que yo vivía, no. Era un lugar
pequeño; no había más que cuatro casas.
P:
¿Fue a la escuela?
R:
Muy poco tiempo. Iría dos o tres años, nada más. No teníamos
madre, murió en el parto de mi hermana, y mi padre se casó a los
seis meses de morir mi madre. Yo entonces tenía dieciocho meses y mi
hermano, tres años. Nuestro padre se marchó y nos dejó con nuestra
tía. Teníamos que cuidar de las vacas, ¿cómo íbamos a ir a la
escuela?
P:
¿Trabajó cuando era pequeña?
R:
Primero trabajé en las cosas de casa, pero en cuanto fui un poco
mayor, trece o catorce años, empecé a trabajar en las fincas, con
el maíz. Y me decía la gente: "
Ai filliña! Traballai, traballai. Ond'a merla rabuñou, millo dou".
P:
¿Y había fiestas allí, en la Lama?
R:
Sí, había las fiestas por Santa Ana, el 26 y el 27 de julio.
P:
¿Iban a ellas?
R:
Cuando fuimos un poco mayores sí, pero de pequeños, ¿quién nos
llevaba? Nadie. Si no había nadie que nos llevara no íbamos.
P:
¿Qué comían normalmente?
R:
Se comía muy mal. ¡Ni pan! El pan hecho con el maíz que recogíamos
no llegaba para todo el año. El cerdo que se mataba (cuando había),
tampoco. La poca leche que teníamos había que venderla para poder
comprar café, azúcar, jabón y todas esas cosas. Dinero no había,
¿quién iba a ganarlo?
P:
Y ya de mayor, ¿por qué razón se fue a Alemania?
R:
Me fui después de casarme, claro. Había que trabajar y no había
trabajo. Y necesitábamos el dinero para ahorrar algo y pagar la
casa.
R:
Vivíamos en una habitación, y allí dormíamos, cocinábamos y
hacíamos todo. Después pudimos irnos a una casa que tenía dos
habitaciones y una cocina pequeña. Y allí estuvimos siempre.
P:
¿Le gustaba vivir en Alemania? ¿Por qué?
R:
Me encantaba Alemania; si no fuera por mi marido no volvía. Me
gustaba aquello. Se ganaba mucho dinero y se vivía de maravilla. En
aquella época aquí se vivía fatal porque no había dónde
trabajar, no había nada. Los pocos que nos marchamos fuimos
levantando el país y ahora mira, lo estropean todo.
P:
¿Cómo cuidaban de sus hijos viviendo fuera?
No hay comentarios:
Publicar un comentario