O noso proxecto

viernes, 27 de marzo de 2015

LIDIA MEIJUEIRO RODRÍGUEZ

"Jugábamos a lo que había, saltábamos a la comba, a la barra, al pilla, a las casitas… No había otra cosa"


Lidia y su marido Ernesto (a la derecha) en una boda en el año 1969


Lidia, viuda y madre de dos hijos,  es una mujer de ya 80 años que como muchas otras madres en su época  se vio obligada a dejar su trabajo para criar a sus hijos. Trabajadora como la que más, y sobretodo, muy buena madre y abuela.
En esta entrevista habla sobre su infancia, familia, trabajo… Su vida.


P. ¿Cuándo y dónde nació?
R. Nací el 30 de noviembre de 1937, durante la guerra, en la casa de mis padres en Santa María de Sacos (Pontevedra), donde ahora vive mi hermana Luisa. Tuve cinco hermanos.



P. ¿A qué jugában cuando érais pequeños?
R. Jugábamos a lo que había, saltábamos a la comba, a la barra, al pilla, a las casitas… No había otra cosa.



P. ¿Tenía algún juguete?
R. Sí, dos que me había hecho mi tío José. Eran un muñeco y una muñeca de palo, la muñeca se llamaba Mariana y el muñeco Panchito, estaban muy bien hechos. También nos hacíamos otros nosotros con una patata de cabeza y un saco de cuerpo. Como a mí me gustaba coser desde pequeña los hacía.


P. ¿Fue al colegio? ¿Dónde estaba?
R. Sí, estaba en la aldea de al lado, en Dorna.

P. ¿Quienes iban?
R. Íbamos todos los niños de la aldea caminando, cuatro veces al día íbamos y veníamos todos juntos.

P. ¿Qué asignaturas estudiaban?
R. Geometría, aritmética, geografía, historia sagrada y también íbamos a catecismo los sábados.

P. ¿Hasta qué edad estudió?
R. Empecé con 8 y hasta los 13 años, casi 14. En cuanto nació Clarita (una de sus hermanas), ya lo dejé.

P. ¿Y qué hiciste al dejar el colegio?
R. Con 16 años fui a aprender a coser y me dediqué a ello, a ser costurera.

P. ¿Dónde trabajaba?
R. En aquellos tiempos íbamos a la casa de la gente y cosíamos allí lo que nos pidiesen. Estábamos un día o igual una semana, depende. Ahora ya no se hacen los trabajos de antes.

P. ¿Qué cosía?
R. Pues depende, camisas a montones, hay vecinos a los que les hice más de diez; también colchones, que era lo que más tardaba, tenías que pasarte un día entero cosiendo, hasta comer allí; remendar sábanas; trajes de novia, una falda y una chaqueta, se lo hice a muchas de mis amigas.

P. ¿Y hasta qué edad trabajó de costurera?
R. Hasta que nació mi hijo Alfonso, luego los crié.

P. Entonces nunca se dedicó al campo, ¿verdad?
R. No mucho, no fui tanto como mis hermanas.

 P. ¿E iba a muchas romerías, fiestas?
R. Sí, íbamos a las de aquí y a las de Dorna, eran las fiestas que había, los bailes. Llevaban a un acordeonista y un saxofonista y bailábamos. 

P. ¿Nunca emigró o lo hizo alguien de tu familia?
R. Yo nunca, pero sí que emigró mi hermana Luisa a Alemania y mi padre y mi hermano José a Brasil. Mi hermano José al volver de Brasil también fue a Alemania y por desgracia, mi padre, volvió enfermo y al poco tiempo murió. Creo que también había muerto en Brasil un hermamo de mi padre, pero no teníamos mucha relación.

P. ¿Y a qué edad se casó?
R. A los 22 años. Antes era normal casarse tan joven. Mi mejor amiga se casó a los 16 y otra a los 18.



Lidia (la única mujer de la foto) y mi abuelo (a su lado de pie) con parte de su familia.


P. ¿A qué edad tuvo a su primer hijo, Alfonso?
R. A los 23, y a tu madre, Carmen, con 27 años. Alguna gente tenía hasta ocho hijos, así que hasta fui rara por solo tener dos.


P. ¿Vivió toda su vida en la misma casa?
R. No, cuando era pequeña con mi madre en su casa, mi padre estaba emigrando, y al casarme me mudé para esta casa, que era de los padres de Ernesto, mi marido. Cuando tu madre tenía dos años nos mudamos para Pontevedra, al piso donde ahora vivís, y al jubilarse tu abuelo volvimos para esta casa. En la aldea estábamos más tranquilos.



jueves, 26 de marzo de 2015

PEREGRINA MARTÍNEZ BELOSO

"En aquel tiempo no había envidia entre las amigas, al revés" 


Peregrina nació en Pontevedra (Galicia) el 23 de agosto de 1936 es una mujer de setenta y ochos años de edad, aferrada a su familia y al bienestar de ella. Su infancia fue dura causada por la baja economía de su casa, a los 23 años se casó con su actual marido y tuvo dos hijos Rafa y Begoña.  

-¿Cómo fue si infancia?
Muy dura,ya que mis padres eran pobres y mis cuatro hermanos y yo, tuvimos que empezar a trabajar desde pequeños.
-¿A qué se dedicaban?
Yo trabajaba en una fábrica de calzado, mis otras tres hermanas trabajaban en una peluquería y mi hermano aún estaba estudiando , porque era pequeño.
-En temas amorosos ¿su primer amor quién fue?
Mi marido, fue el primero y el último.
-¿A qué edad se casó?
A los 23 años
-Pero ¿ de más joven no tuvo ningún novio?
Ninguno, solo él.
-¿Por qué, sus padres no la dejaban?
No, pero a él lo conocí en la fábrica, nos enamoramos y nos casamos.
-Cuando era pequeña ¿qué quería ser de mayor?
Lo único que quería era vivir bien, trabajar y que no me faltara de nada.
-Pero ¿ no quería ser algo en concreto?
No, trabajaba en la fábrica y era muy feliz, ya que mis jefes me apreciaban mucho. Luego entró mi marido, nos hicimos novios allí y nos casamos, además nuestros jefes nos dieron casa para vivir.
-Hace años ¿cómo se aseaban?
Pues en una tina, teníamos que calentar el agua en la cocina de hierro y nos bañábamos en la tina uno por uno. Porque no había cuartos de baño, nadie tenía.
-Pero ¿ no había duchas como ahora?
No, nadie tenía duchas ni cuarto de baño.
-Y ¿ no había locales en que hubiera y que te pudieras duchar?
Que va, las duchas vinieron después, en aquel tiempo no había cuarto de baño excepto los millonarios pero los pobres no, tenías que ducharte en una tina.
-¿Le gustaba?
No había otro remedio porque otra cosa no había y teníamos que ducharnos. Eso lo hacíamos todos los días.
-¿Y en temas de viajes?
De viajes nada, ni excursiones de colegio, no podíamos ir a ningún sitio, por que mi padre también tuvo un accidente y rompió el brazo derecho y por culpa de eso sólo sobrevivíamos con el sueldo de mi madre y eramos siete en casa, cinco hermano, mi madre y mi padre

-¿Pero a su padre no se le curó el brazo?
Sí, pero ya no podía trabajar ya que le quedó inutilizado el brazo.
- ¿ En qué trabajaba su padre?
Trabajaba en los Almacenes Carrascal junto con mi madre.
-¿Tenían un buen sueldo?
No, en esos tiempos no se ganaba bien, se ganaba muy poquito.
-¿Iba al colegio?
Sí, pero salimos muy pronto por culpa de ir a trabajar para tener algo que comer.
-¿ Pero no podía compaginar el trabajo con la escuela?
No, íbamos a la escuela de noche y trabajábamos de día de niños. La escuela era de monjas.
-¿Y cuando lo dejó por trabajar no se sintió mal?
Claro que me sentí mal,pero había que comer y entonces tuvimos que empezar a trabajar muy pronto todos.
-¿La escuela de hoy en día se diferencia mucho en la de tu época?
Yo creo que hoy enseñan más que antes o a lo mejor es porque yo fui poco al colegio. Hoy se sabe más que antes.
-¿ Qué materiales utilizabas en la escuela?
Lo mismo que ahora. Pero seguramente hay más libros pero en aquel tiempos teníamos lo mismo que hoy. También llevábamos deberes para casa.
-¿Cómo eran los profesores con ustedes?
Eran muy buenos, yo tuve tres profesoras que eran muy buenas.
-¿Eran cómo los clásicos?
Sí, te castigaban de rodillas y con las manos extendidas, y te pegaban con la vara.
-¿Entonces se portaba bien?
Gracias a Dios sí. En ese sentido nunca me pusieron de rodillas, pero si me tenía que poner me ponía, pero nunca lo tuve que hacer.
-Cuénteme alguna anécdota del colegio.
Antes de que llegara la profesora le cogíamos el lápiz a una de las niñas o a un niño, y cuando venía la profesora ya se lo dábamos porque sino no tenía con que escribir,además para que la profesora no se enterara.
-¿Tenía un grupo de amigas?
Si, nos juntábamos cuatro o hasta seis depende,nos ayudábamos mutuamente.
-Entonces no es como hoy en día, que algunas tienen envidia de otras.
No, en aquel tiempo no había envidia al revés, si una no sabía algo la ayudábamos,era distinto.
-¿Había alguna de ellas que fuera la más rica?
Sí, sí que había.
-¿Y no presumían?
Que va, eran como las demás, Ellas se juntaban con nosotros y nosotros a ellas, como si fuéramos todas iguales. Ahora hay mucha gente que presume.
-Hace años se veía el machismo, ¿cómo os trataban?
Muy mal, las mujeres trabajábamos muy pocas. Las mujeres que se casaban tenían que quedarse con los hijos en casa, el hombre iba a trabajar, pero como se ganaba tan poco... La mujer tuvo que atender a los hijos, a la casa y al trabajo. Las tres cosas tenía que hacer la mujer.
-¿ En su familia no se veía machismo?
No, de eso nada.
-Y ¿ qué pensaban las mujeres de su familia sobre el machismo que había en otras casas? 
Antes no era como ahora ,que todo el mundo habla de todos. Antes no había tiempo para hablar con nadie, ni con los vecinos, porque había que trabajar, ir al colegio y atender a los niños.
-Y ¿notas cambios de su época a esta?
Sí, aunque en este momento se esté mal, se esta mucho mejor que años atrás y tanto mis hermanas como yo, hemos mejorado mucho en nuestras vidas.
-Antes me había dicho que usted iba a trabajar ¿ganaban suficiente dinero?
Muy poquito, antes no había unos sueldos como los que hay hoy en día, eran unos sueldos muy escasos, por eso tuvimos que empezar a trabajar pronto, porque con el sueldo de mi madre, no llegaba para pagar la casa y eso que de aquella se pagaba poco, pero no llegaba el dinero para comer.
-¿Sus sueldos eran acordes a lo que trabajaban?
Trabajábamos más, que la gente de hoy en día, ya que los jefes nos supervisaban a cada rato, para que trabajáramos y hoy cada quién trabaja lo que puede.
- ¿Y ustedes no le decían nada a su jefe?
Es que no podíamos decirle nada, el que hablara a la calle. No es como hoy “esto no lo hago, esto no lo quiero” entonces no se podía decir nada de eso.
-¿Cuándo estaba en casa ayudaba a su madre en algo?
En todo, yo cuando salía de trabajar, antes de casarme, con 17 o 18 años salía de la fábrica, cogía una tina de ropa sucia y todos los días de la semana iba al río a lavarla.

-¿Por qué los hacía?
Porque era la primera que llegaba a casa y la que llegaba de primero tenía que coger la tina de ropa, ya que había que cambiarse todos los días. No es como hoy, que tienes cuatro pares de zapatos o cinco, tienes ocho vestidos, no, nosotros de aquella teníamos dos vestidos, lo lavabas a la noche y lo ponías al día siguiente. Hoy en día la vida es muy distinta.

-¿ Sus hermanas también ayudaban?
No, mis hermanas salían más tarde de trabajar, la que llegaba antes era yo. Porque ellas las tres trabajaban en una peluquería y venían tarde.
-¿Cuántos años tenía?
Pues tendría 15 o 16 años, cuando iba con la tina de ropa.
-En temas de su casa, ¿la comida la hacía su madre?
La comida cuando nosotros teníamos 12 o 13 años el que llegaba antes hacía de comer.
-¿Pero para una persona?
No, para todos, allí comíamos todos juntos.
-¿Qué era lo más típico que comían?
Pescado cocido, o carne guisada con arroz, fideos o un cocido pero este ya era el domingo.
-Entonces tenían horario para comidas.
Claro, cosas rápidas ya que había que ir al colegio o a trabajar.
-¿Recuerda alguna vez que su familia y usted hubieran pasado hambre?
Hambre nunca, ya que yo vivía donde se encontraban los marineros y nos regalaban mucho pescado.
- Se lo regalaban y ¿no les pedían nada a cambio?
No, eramos buenos vecinos y cuando venían con el quiñón nos regalaban pescado para nosotros, en ese sentido todos los vecinos nos llevábamos muy bien.
-Aparte de sus hermanos, sus padres y usted vivía alguien más con ustedes?
No, teníamos familia pero cada uno vivía en su casa.
Hábleme un poco de su familia.
Pues cuando venía Corpus que era un día muy especial, venía mi tío que no tenía hijos y mi tíaa comer a nuestra casa, y cuando salía el santo cerca de nuestra casa para la procesión y había fuegos artificiales y todos contentos porque había carne asada o había pollo, que de aquella no era muy típico el pollo ni la carne asada y en cambio ese día sí. También estábamos deseando que fuera domingo o un día de fiesta porque venían mis tíos a comer con nosotros.


-¿Sus abuelos vivían lejos?
No, vivían cerca.
-¿Iba frecuentemente a visitarlos?
Sí,sí. Todos los días.
-¿Tuvieron que ayudar económicamente a sus abuelos?
No, ellos ganaban para ellos y nosotros para nosotros, Al contrario cuando íbamos y tenían fruta o tenían pan o cualquier cosa, me ponían en la mano una manzana., una pera...Siempre te daban algo. Los abuelos se portaron muy bien con nosotros.
 -¿Los días de Navidad que hacían?
Los días de Navidad nos juntábamos todas la familia para cenar juntos.
-¿Qué les daban de regalos?
Solo nos daban una muñeca de trapo. No es como ahora que abundan los juguetes por todas partes. En aquella época no se llevaba eso.
-¿Se conformaban?
Claro, estábamos encantados con esa muñeca de trapo.
-¿Sus padres alguna vez hicieron un esfuerzo para comprarle algo?
Cuando empecé a trabajar me daban un detalle, ya era distinto.
-En temas de sanidad ¿ a dónde iban cuando estaban enfermos?
Íbamos al Malvar (Centro de Sanidad).
-Para ir a las fiestas ¿que daban sus amigas y usted para ir?
Sí, no nos perdíamos ni una. Íbamos a la de la Peregrina, había churrarías, lo pasábamos muy bien.
-Y cuando acababa de hacer los oficios en casa ¿salía a jugar con sus amigos?
   No, a jugar se salía los sábados y domingos, por la semana había que trabajar.
   -Entonces, ¿no tenía tiempo libre?
   Nada.
  -Y ahora ¿cómo ve que algunos niños en vez de estudiar estén haciendo otras cosas?
   Yo, ahora pienso que a lo mejor la culpa la tenemos los padres. Pero hoy una mujer que se casa a los 23 años, no sabe hacer nada, ni cocinar, ni hacer la cama... nada. Y a nosotras desde pequeñas nuestros padres nos acostumbraron a trabajar.
  -Cuando vuestros padres se iban a hacer recados ¿ qué hacíais para divertiros?
   Jugábamos a las cartas, al lípez o a la cuerda.
  -¿Cómo era un día normal para usted?
  Trabajar, ir al colegio e ir al río. Un día diferente era cuando jugábamos un poco que eran un santo, un domingo o un sábado a la tarde.
  -Y sobre Franco ¿qué me puede contar?
  Lo que he oído de Franco, es que en mi casa se pasó muy mal, pero claro yo era muy
  pequeña cuando estaba Franco. Y cuando fue lo de la guerra yo aún no había nacido, Pero oí en casa que era una miseria, que se pasó mucha hambre.... Muchas cosas.
 -Por lo que oyó ¿alguna persona de su familia fue a la guerra?
De mi familia a la guerra no fue nadie. Pero cuando fue de que llevaban a la
gente a la Caeira, mi tío tenía un bar y mi padre trabajaba con mi tío, y un día fue
la guardia civil a preguntarle a mi padre que dónde estaba mi tío, y mi padre le dijo que no sabía y lo llevaron detenido a la Caeira y en ese lugar a los que llevaban detenidos los sacaban por la noche y les decían que se fueran a sus casas y los mataban. Pero mi padre tuvo suerte y gracias a un jefe de los que estaban allí, le avisó que si le mandaban que se fuera a su casa por la noche, que les dijera que la mujer no les abriría la puerta, ya que la gente tenía miedo de que fuera la guardia civil. Y entonces cuando salió de trabajar el señor que le ayudó, mi padre salió con él y lo acompañó a casa para que no le mataran. A mi tío lo cogieron y lo mataron.
   -¿Cómo vivió su familia la muerte de Franco?
     Pensamos que a ver cuando cambiaba esto porque con Franco nos moríamos de hambre.
     Por morir una persona nadie se pone alegre.
    -¿Cómo era su casa?
      Era una casa pequeña , de planta baja, no era nuestra que ya que era alquilada. Tenía una cocina , el baño que el váter era de madera, la habitación de mis padres y la habitación de las cuatro niñas y en el comedor se acostaba mi hermano. Teníamos una cama de abrir y cerrar para mi hermano.
    -¿Su ropa la confeccionaba su madre?
      No, la hacía la costurera, que era la dueña de vuestra casa.
    -¿Se vestía de forma especial alguna vez?
Cuando venía Corpus, nos poníamos un traje nuevo siempre. Cuando era Carnaval me
ponía un vestido de cualquier manera y una careta.
-¿Cómo ve la sociedad de hoy en día?
Muy mala, hay mucho paro y mucha gente tiene que ir a otros sitios para comer.
-En temas de religión ¿iba a misa?
Todos los domingos, íbamos a catecismo.
-¿Su padre le obligaban?
No, íbamos nosotros a la iglesia. Hicimos la primero comunión como cualquier rico y
estamos todos bautizados.
-¿ Qué importancia tuvo la religión en aquel tiempo?
Todo el mundo quería ir a misa.
     -¿Cómo ve la sociedad de hoy en día?
      Muy mala, hay mucho paro y mucha gente tiene que ir a otros sitios para comer
     -Bueno, esto es todo, muchas gracias.



                                                                                        STEFANNY HERMIDA FIGUEROA - 3º A ESO

MARÍA DEL CARMEN VAZQUEZ CASAIS

"En el colegio nos pegaban, nos daban con una vara si no nos portábamos bien"

 María del Carmen Vázquez Casais, Cambados, Pontevedra, 1937


María del Carmen Vázquez Casais, nació en Cambados, Pontevedra, el 22 de marzo de 1937. Tiene una vida feliz, pero también ha tenido momentos duros. Su padre era sastre y su madre trabajaba en casa, por lo que su situación económica era estable. 

 ¿Cómo fue su infancia?
- Pues fuimos cinco hermanos, y mi infancia fue muy feliz. Mi padre era sastre y mi madre trabajaba haciendo ganchillo, paños, vendiendo cestos…. Y tuvimos una infancia buena, no de mucha holgura pero bien para vivir.

María del Carmen de excursión con su padre y sus hermanos
¿Cuándo eras pequeña trabajabas?
- Yo fui a la escuela, a la escuela publica, hasta los nueve años, por que a los nueve años ya no podíamos seguir. Pues había que hacer el ingreso y venir a Pontevedra y como mis padres no podían llevarnos tuvimos que dejar la escuela y me puse a trabajar con mi padre en la sastrería.

¿Cómo era tu escuela?
- Mi escuela era solo de niñas, y allí aprendí a escribir, leer y nada más.
¿Cómo eran los profesores?
- Había una profesora para todos, se llamaba María Rial.

¿Recuerdas alguna anécdota escolar?
- Muchas porque nos castigaban, nos pegaban con una vara en la mano si no nos portábamos bien. “Poníamos las manos así y nos daban con una vara”. Al que no se portaba bien claro. 
¿Cómo llegabais al colegio?
- Andando, estaba cerca de casa. En una plazoleta allí. 
¿Qué labores hacías en casa?
- Bueno pues al salir de la escuela, iba ayudarle a mi padre en la sastrería, picaba solapas y sobrehilaba pantalones. Luego a los 11 años me fui a una fábrica de marisco y pescado, la fábrica de José Peña Ouviña, y allí trabaje hasta los 17 años. De los 11 a los 17. Por la noche, en esos días, iba a la escuela nocturna que ponían las monjas salesianas para prepararme un poco más. Era gratuita, y aprendí mucho más que en la escuela, pues en la escuela solo aprendí a leer, lo que es lo justo, porque como teníamos que salir. Eso es lo que va a pasar ahora creo, con la nueva Ley Wert. 
8. ¿En algún sitio mas trabajaste?
- Trabajé en la fábrica y luego a los 17 años me vine a trabajar aquí a una casa en Pontevedra con los de Peláez, con Emilio Peláez, porque tenía cuatro niños y yo era su niñera. Estuve hasta los 25 años en esa casa. Con 25 años me fui a París. Allí trabaje en una casa, en la que me querían mucho los patrones, y yo los quería mucho a ellos, y estaban mis amigas Juana y Luisa, que fueron el motivo por el que me fui, claro estaban ellas allí y me anime a ir. Me casé, conocí al abuelo, y tu madre y el tío nacieron en París. 

María del Carmen en casa de los niños a los que cuidaba
¿Alguien más de tu familia tuvo que emigrar?
- Mi hermana, la tía Lourdes.


¿Para viajar cómo os desplazabais?
- ¿Para ir a París? Pues en el tren, íbamos de Cambados a Pontevedra, cogíamos el tren hasta Redondela, y allí otro tren hasta Irun. 
¿Cómo era un día en tu vida?
- Pues me levantaba por la mañana, trabajaba en la casa, hacía la compra, luego tenía mi descanso de 3 a 6 de la tarde, y luego volvía, les hacía la cena y a las 8 de la tarde ya estaba libre.

María del Carmen y sus amigos de excursión a Rouan en Francia
¿Qué solías comer?
- En Francia se comía muy rico, muy bien, se comía de todo: pescado, toda clase de carne de ave, de faisán, de pato… Allí aprendí a comer cosas muy ricas
¿Cómo os aseabais?
- Yo me daba mis baños en la casa.
¿Y cuándo eras pequeña?
- En un barreño enorme que tenía mi madre, nos lavaba los sábados.
¿Alguna vez pasasteis hambre?
- Hambre no, necesidad de muchas cosas sí, pero hambre no. 
Entonces, ¿cómo dirías que era tu situación económica?
- Mi madre hacía manualidades que luego las vendía, y siempre sacaba dinero para comprar comida. Y mi padre era sastre, pues cuando tenía trabajo hacía trajes y también cobraba el hombre. Entonces teníamos todos para comer.

¿Si estabas enferma a donde ibas?
- Teníamos el medico de Don José Padín, que era el que nos atendía a todos
¿Cómo organizabas las fiestas?
- De noche siempre íbamos allí a la calzada con mis padres a las verbenas. Yo iba con las monjas los domingos. Íbamos de excursión, jugábamos todas las niñas allí en el patio. Yo iba con las Salesianas.


María del Carmen en una comida familiar

 ¿En las fiestas llevabas alguna vestimenta especial?
- No, teníamos la ropa que teníamos.


María del Carmen de fiesta
¿Dónde conseguíais la ropa?
- Mi tía que era costurera, mi tía Beatriz, y ella nos hacía todos los arreglitos
¿Alguien de tu familia fue a la guerra?
-No, nadie fue a la guerra. 
¿Cómo afectaba la dictadura y el franquismo a tu familia?
-Vivíamos con ella, era lo que había y no nos afectaba nada, había que tener respeto a no cometer ningún delito.

¿A qué edad tuviste hijos?
-Pues yo tuve a tu madre, que fue la primera, con 29 años. Al tío con 40 y al tío Pedro con 42, y al tío Óscar ya con 44.


María del Carmen con su marido y sus hij@s
¿Con quién y dónde creciste de pequeña?
-Con mis hermanos, mis padres, tenía muchas amigas, dormía mucho en casa de mis amigas, Choncha y Carmiña.
¿Salías mucho a jugar con tus amigos?
- Si muchísimo, jugábamos mucho en la calle. Y de noche jugábamos al escondite todo un grupo de niños y niñas. Lo pasaba muy bien, mi infancia fue muy bonita
¿Cómo era tu casa?
-Pues mi casa era pequeñita, es una sala y una habitación en la que dormían en una cama grande mis padres, en otra las dos mujeres, y el la de fuera los hombres, en la de la sala.
¿Cuántas personas vivíais entonces en la casa?
-Pues mis padres y mis 4 hermanos, siete
¿A qué te dedicabas en tu tiempo libre?
- Íbamos allí al colegio de las Salesianas, allí aprendí a coser, bordar, en el tiempo libre jugábamos al oratorio, luego íbamos de excursión, fuimos a Santiago, cuando se cerró la puerta santa y estuvimos con el cardenal Quiroga Palacios, le besé el anillo, son recuerdos todos muy bonitos.
¿Hacías algún deporte?
- Jugábamos al voleibol, nos poníamos una raya y echábamos la pelota de unos a otros.
¿ibais de vacaciones en verano?
-No, nosotros no salíamos de Cambados para nada. Teníamos playa allí. 

María del Carmen y sus hijos en la playa
31. ¿Recuerdas alguna anécdota de cuando eras joven?
-Recuerdos muchos, yo con cuatro añitos me quemé con agua hirviendo, recuerdos de cuando se casó mi hermano, cuando tuve mi primer sobrino.
32. ¿ibais a misa?
- Sí, íbamos a misa, íbamos al Rosario, San Benito, la Inmaculada, Cristo Rey, íbamos a todos los eventos que había de iglesia.

María del Carmen en su primera comunión
¿Cuál era vuestra religión?
-Católica

María del Carmen cuando le concedieron la medalla de hija de María

 ¿La religión qué importancia tenía en vuestra vida?
-Para mi muchísima, y hoy también muchísima porque yo todo se lo pido a Dios, y yo veo que sí que Dios me ayuda. 
¿En qué crees que ha cambiado la sociedad?
-No tiene nada que ver, nada que ver. Esto ahora es una maravilla yo recuerdo cuando la abuela lavaba la loza y la ropa allí con el agua fría y hoy yo toco el agua fría por la mañana que la toco aposta para sentir lo que sentía mi madre que no había la comodidad que hay ahora, no había lavadora, había que fregar con cubos de agua, no había grifos. 
 
 ¿Qué cosas crees que fuera mejor antes que ahora?
- Pues yo aunque tuve una infancia muy feliz y muy bien yo prefiero todo lo de ahora, no tiene punto de comparación. 
¿Crees que la sociedad ha cambiado?
-Hombre, hay menos humanidad, hay mas avaricia, la gente solo quiere dinero, antes había más amor, se ayudaban más unos a otros, dolían más las cosas, ahora a nadie le importa nada, eso sí, en eso cambió todo.

Estela Justo Lope